- La ONU quiere que la COP27 sea una conferencia que permita llevar a cabo acuerdos.
Alrededor de 200 países aprobaron debatir la idea de un fondo de daños y pérdidas por el cambio climático, al inicio de la conferencia anual de la ONU (COP27), preocupada por los fenómenos meteorológicos extremos.
La iniciativa es una vieja exigencia de los países pobres y en desarrollo, los más afectados por el calentamiento del planeta y tras años de forcejeo, los países ricos accedieron a conversar al respecto en la COP del año pasado, en Glasgow, por lo que ahora forma parte de la agencia oficial en Sharm el-Sheij, tiene por delante aún dos años.
La ONU quiere que la COP27 sea una conferencia de «implementación» de acuerdos ya pasados, que habitualmente son incumplidos por la gran mayoría de países miembros, por lo que en estos días unos 120 jefes de Estado y de gobierno acudirán a Sharm el-Sheij oficialmente, para dar un impulso a las negociaciones, que se traducen en miles de millones de dólares de inversión.
Además de toda la batalla económica, los asistentes a la COP deben examinar cómo han cumplido con su promesa de aumentar sus cuotas de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.
