- Las listas de espera son una emergencia nacional. No desde ahora, sino que desde hace muchos años.
El presidente Boric anunció en su cuenta pública una considerable reducción de la mediana de los días de espera para intervenciones quirúrgicas en nuestro país, así como la lista de espera de consultas de especialista.
Antes de la pandemia, el promedio de días de espera por cirugía era de 314 días, subiendo a 574 días después de la pandemia. El presidente espera bajar en un 40% estas medidas al final de su mandato, objetivo tremendamente loable, pero insuficiente.
Si nos planteamos una baja de este calibre, la media sigue siendo tremendamente asombrosa. Nada menos que 347 días de espera en promedio para una intervención quirúrgica. Siendo esto un promedio, quiere decir que existen pacientes que esperan más de 1000 días por una intervención.
Lo penoso de esto, es que las largas listas de espera se han mantenido así desde hace décadas, administración tras administración, de izquierdas y de derechas. Las cifras siguen ahí, elevadísimas. ¿Cómo va a ser “humano” tener que esperar 300 días por una cirugía? ¿Cómo no tener impotencia, al ver como la calidad de vida de un paciente se deteriora cada día mientras espera por su intervención?
Las listas de espera son una emergencia nacional. No desde ahora, sino que desde hace muchos años. No puede ser que hayamos perdido la capacidad de asombro, así como tampoco puede ser que la sociedad civil piense que es sólo responsabilidad del estado hacerse cargo de esta realidad.
Muchas iniciativas privadas han logrado con mucho éxito solventar problemas de salud de nuestra población ( Teletón, Coaniquem). Es menester de nosotros también, saber que también podemos ser parte de la solución.